Llevo más de un mes queriendo escribir esta entrada pero no he encontrado el momento de inspiración, que aún no me ha llegado, pero no puedo esperar más.
Quiero advertir de una serie de cosas a todas aquellas personas que se encuentren sumergidas en un proceso de emprendimiento.
Imagino que ya te encuentras desarrollando por segunda o tercer vez tu plan de negocio, aquel que con tanto mimo te pusiste a desarrollar durante más de un mes y que por lo último que te están contando en las charlas resulta que no se hace así, que eso de hacer planes a 5 años vista es de la antigüedad y que hoy en día la cosa se hace "más a la ligera" o como sea que se traduzca el concepto del LEAN. En resumen, que ahora te toca apuntarte al curso ese del Lean Management y del Canvas Model.
Y también estarás preguntándote porqué después de haberte hecho los perfiles más molones de todo el universo LinkedIn y Twitter casi nadie se ha interesado en preguntarte en qué consiste tu proyecto o qué servicios son los que ofreces. Por ello estás pensando que quizá es porque no eres lo suficientemente participativo y que deberías saber más y apuntarte a un curso sobre "cómo sacar provecho a red social X".
Mira que también te has hecho el blog en el cual vas publicando muchas cosas interesantes a las cuales le has añadido cierto nivel de tecnicismo, porque claro, esto va en serio (aficionados abstenerse). Es más, te has hecho toda una pedazo página web, con los plugins más molones del momento, en la cual no sólo está tu blog sino también una página de contacto, otra de presentación, otra donde pones lo que ofreces, el logo y "toda la pesca".
Pero incluso has ido más allá, con las tarjetas, con tus códigos QR para controlar cuántas personas lo han visto, recopilando cosas buenas de esas que Internet está lleno en tu periódico digital, tuiteando, compartiendo, comentando... Pero no parece que el resultado sea muy bueno. De hecho ya te has especializado en mirar las estadísticas de tu página web, de tu blog, de la gente que retuitea tus cosas, del tiempo que se están leyendo tus artículos, etc. Esas mismas métricas que llevan estancadas varios meses y que no parecen ir más allá muy a pesar que tú ya sabes que estas cosas no tienen efectos inmediatos y que has hecho todo lo posible para que esté todo correctamente indexado en los buscadores o esas cosas que llaman SEO y tal.
El caso es que para todo ello ya te has chupado unas cuantas charlas y cursos, véase plan de negocio, redes sociales, tu marca personal, emprendimiento, financiación, que si los Business Ángels (que vuelan tan alto que ni los vas a ver), que si prepara tu speech, que si SEO, SEM, adwords...
Llegados a este punto sólo me cabe decir unas palabras que no recuerdo dónde las vi, pero que ahora se pueden encontrar en un status de twitter: Un parado no es un parado, es un profesional que no tiene clientes
Esto nos lleva a la única y verdadera clave. A abrir los ojos para darnos cuenta de cuál es la métrica PRINCIPAL que un emprendedor debería tener en mente. Los clientes.
La variable clave a observar y en la cual se debe basar nuestro emprendimiento es:
- ¿Cuántos clientes tengo?
- ¿Cuantos clientes me están proporcionando mis contactos?
Porque si la respuesta es ninguno o casi ninguno entonces nos podemos pasar la vida rehaciendo planes de negocio, escribiendo entradas de blog, compartiendo en Internet, comentando por las redes y asistiendo a charlas y cursos sin fin. Todo lo que hagamos debe estar en relación a los clientes.
No voy a decir que sin clientes estamos perdiendo el tiempo. No voy a ser así de negativo porque es algo que no creo. Hay que luchar por conseguirlos. Uno debe darse la oportunidad de intentarlo. Pero sin ellos no hay emprendimiento real, sino una simulación del mismo.
Si tenemos clientes es fácil imaginar cómo es nuestro día a día en el que hay visitas, trabajo, entregar informes, recibir pedidos, etc... Todo radicalmente distinto a lo que pueda ser ir a cursos, estar en las redes, escribir en los blogs...Por ello hay otra advertencia a hacer:
Hay mucha gente interesada no en el emprendimiento real, sino en el simulado. El emprendimiento supone una vía de negocio para muchas personas y de subsistencia para algunas entidades públicas.
He aquí una tabla de correspondencia entre tema de interés -> negocio interesado:
- Plan de negocio -> Escuelas de negocio, Organismos públicos de "fomento" y sucedáneos
- Redes Sociales -> Cursos de community manager y de marca personal
- Página web & blog -> Diseñadores web
- Aparición en resultados de búsqueda -> Posicionamiento SEO, SEM, etc
- Trabajo sin oficina -> Espacios de coworking, incubadoras y similares
- Concursos de innovación -> Empresas incapaces de innovar
Ojo. Opino que estos negocios son totalmente legítimos. Lo que advierto es que no debe uno dejarse llevar por la euforia, en ocasiones de tipo sectaria, y centrarse en lo primero y principal: trabajar para los clientes. De lo contrario puedes llegar a formarte una nebulosa mental que te haga llegar a perder el sentido de la orientación, del dónde estás y del dónde vas. Conozco el caso de uno que estaba haciendo su emprendimiento mientras cobraba el desempleo y llegó a abstraerse hasta tal punto de no renovar la prestación.
El concepto que damos por muerto en esta entrada es "la inocencia en el emprendimiento" pues está claro que ha habido un boom que no se podrá repetir en el futuro. Por otro lado ha llegado el momento de poner los pies en el suelo y leer esta entrada que de una forma sencilla y directa dice verdades como templos que todos esos interesados en el "emprendimiento simulado para gentes inocentes" se van a encargar muy mucho de no contarte y, a ser posible, ocultarte.
PD: Las personas que han pasado por esta fase y han perdido la "inocencia" están hechas de otra pasta. Adquieren un plus que las hace EXTRA POWER respecto a las que no ;-D
Muy de acuerdo, aunque aún estoy buscando mi "extra power" para seguir, remodelar, adaptar... Y mientras tanto comer, claro :)
ResponderEliminarMuy ciertas tus palabras!
Empezando por la segunda parte. Si tu eres emprendedor y el mercado potencial más importante es el de los emprendedores, pues hala a intentar venderles.Y si eres una empresa en semicrisis pues este es un nuevo filón de clientes.
ResponderEliminarEn cuanto al plan de negocio:
Busca un servicio/producto que no requiera inversión. busca un servicio/producto que realmente sea útil /necesario /mejore la vida de la gente, ...
¿Te sobra tiempo y aun alguien te puede mantener?. Sal a la calle y regalaló al primero que encuentres. procura que quede encantado. Que te presente a unos amigos a los que cobraras poco, muy poco, por debajo de coste/tiempo.
Que estos te presenten a otros que ya te pagaran precio coste y los siguientes ya ganaras.
Mientras, experimentas y mejoras tu servicio/producto.
Haz demostraciones gratis y colabora con amigos y participa en algunos foros. Interesate por como los empresarios o profesionales que vas conociendo resuelven esta necesidad a la que tu das respuesta y proponles tu alternativa. 1 de cada 100 te la comprará. No te harás rico pero si lo que vendes te gusta, te lo pasaras bien,
Las únicas cuentas que tienes que hacer es saber cuando es el momento de ir a ver a aquel amigo que te puede pasar un poco de pasta por servir cañas en su bar (este es el plan B)Tambien buscate un tiempo para aprender aleman, ruso o chino.
No los tomes como consejos. Simplemente es la experiencia de otros ;-)